Marc Márquez se prepara para un momento histórico en su carrera al pilotar una Ducati de fábrica por primera vez en Mugello, frente a miles de aficionados italianos. El piloto español, líder del campeonato de MotoGP con 233 puntos, llega al Gran Premio de Italia en una excelente fase de la temporada, tras una actuación casi perfecta en Aragón. Esta será una oportunidad única para el ocho veces campeón del mundo de mostrar su talento en una de las pistas más emblemáticas del calendario, vistiendo los colores rojos del Ducati Lenovo Team por primera vez en suelo italiano.
‘Será mi primera vez en Mugello con los colores del Ducati Lenovo Team. Sin duda, será una gran sensación salir a la pista frente a todos los Ducatisti’, declaró Márquez, destacando la importancia emocional de este momento. El piloto de Cervera reconoce el significado especial de representar a la marca italiana en su territorio, en una pista donde los aficionados de Ducati constituyen una verdadera legión. Esta combinación entre el talento del español y la pasión de los tifosi promete crear una atmósfera única durante todo el fin de semana.
El análisis técnico de Márquez sobre el circuito toscano revela optimismo acerca de las características de su Desmosedici GP. ‘La pista de Mugello, gracias a su trazado y larga recta, es capaz de sacar lo mejor de las prestaciones de la Desmosedici GP’, explicó el piloto. Esta observación subraya cómo las cualidades aerodinámicas y de potencia de la máquina italiana se adaptan perfectamente al trazado de Mugello, donde las altas velocidades y las frenadas tardías son fundamentales para el éxito.
El líder del campeonato mantiene los pies en la tierra, reconociendo que repetir la excelencia demostrada en Aragón no será una tarea fácil. ‘Será una semana ocupada, también en términos de eventos, pero podemos hacerlo bien. Venimos de un GP prácticamente perfecto, no será fácil repetirnos aquí, muchos serán fuertes, pero podemos luchar, estamos en buena forma’, analizó Márquez. Esta mentalidad equilibrada demuestra la madurez del piloto, entendiendo las demandas específicas de cada circuito y la extrema competitividad de la categoría.
‘Podemos luchar, estamos en buena forma’, concluyó Márquez, resumiendo la confianza del equipo para enfrentar uno de los grandes desafíos de la temporada. Con solo una victoria en Mugello en la clase premier, lograda en 2014, el español tiene una motivación extra para añadir otro triunfo a su récord en un circuito que promete resaltar las cualidades de Ducati. La combinación entre la experiencia de Márquez y el potencial de la máquina italiana crea altas expectativas para un fin de semana que podría ser decisivo en el campeonato.